Aun recuerdo como me escribieron las amigas de Laura toda emocionadas para reservar fecha en el estudio. Querían regalarla una sesión en grupo con todas ellas el día de su despedida de soltera.
Decir que se lo pasaron pipa es decir poco, comieron y bebieron de nuestro piscolabis, rieron, bailaron... luego por Madrid seguriía la fiesta, pero ellas la empezaron en el estudio, todas
juntas, todas amigas.
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